Se termina septiembre, pero las flores siguen asombrándonos con su belleza y colorido. También nos preparamos y ya muchas flores se convertirán en pinches, trabas, prendedores de una o más florcitas. Simples y de un color o combinadas, son un accesorio sencillo pero hermoso.
Estas se preparan para adornar la cabellera de niñas y lolitas, que gusten de las flores.
Por su parte, la naturaleza nos enseña diversas flores: desde las más sencillas a la más sofisticada orquídea.
El menbrillo de flor es un arbusto de profusa floración temprana. Florece a fines de invierno, por lo que se adelanta a muchas otras especies. Su flor es sencilla pero de un hermoso color rojo. Tambien los hay de flor blanca y rosa. Su fruto es un pequeño menbrillo muy aromático. Es una planta alegremente colorida.
En contraste, el durazno de flor con su nívea floración, suaviza cualquier rincón del jardín o patio. Es un árbol de mediana altura, pero se utiliza en jardines por su floración y no por su fruto, que es un tanto desabrido.
Los duraznos de flor también los hay con flores rosadas pálidas y fucsias. Todos son de flor doble y todos son muy hermosos. Se les ve generalmente como árbol de sombra en las calles.